FRANCISCO SOLANA

Perdone que le moleste pero envido a grandes. Que tiran más que dos carretas. Con esta crónica me meto en el charco hasta los pechos, nunca mejor dicho,y estoy seguro de que voy a salir más escaldado que una pularda.

Yo soy de la antigüa EGB y lo que sabía de Ucrania es que otrora fue un país de la extinta URSS donde a los presidentes se les tiene la pequeña manía de envenenarlos sin querer, les ponen la cara naranja como su bandera con la pueril intención de hacerles un traje de madera. Creo que la tela que usaron era lo más parecido al polonio. Yaser Arafat dicenque también fue al mismo sastre.

Pues ahora, lo más conocido de Ucrania son las tetas de las Femen, allende Catalonia llamados más políticamente correctos pechos radiofónicos, es decir, on the air, como el sentimiento y fervor payés.

Anna Hutsol es su Mama Louise particular, por eso de Ven a mis pechos... Es la jefa del cotarro en lo de reivindicar los derechos de la mujer a teta descubierta, Se ve que como le apretaban mucho se dejó sus sujetadores en Kyiv, posiblemente en un colgador de Zara o alguna que otra cadena de esas que está en todas partes como la Coca-Cola y la corrupción. Corría el año 2008.

Sus lugartenientes amazónicas, por eso de enseñar los pectorales dando guerra son nueve, a saber, Alexandra, Inna, Oksana, Olga, Anna, Eugenia, Alina, Katerina y Olga. Les faltan dos para que Tarantino ruede el remake de Doce del patíbulo, pero no se me ocurre quién. A nuestra ministra Fátima Báñez no la termino yo de ver muy Femen, está muy atareada con el INEM dando fe de una cantidad de parados como nunca los ha habido, y la Botella me da que no pasa el casting. La primera es más recatadita, por no llevar, no lleva ni abalorios. Las cosas que tiene el Opus Dei. A la segunda no termino yo de verla tomándose un relaxing cup of café con leche en topless en la Plaza Mayor. Me da que hasta las carteristas rumanas se les iba a caer lo birlado del descojone que les iba a entrar.

Estas pobres carteristas han venido engañadas. La vida las ha tratado muy mal. En Ucrania les dijeron a la mayoría que iban a venir a España de directoras de Bankia, de jefas de producción de SEAT, de Head Hunters para una gran firma o de Altas Ejecutivas en Contrucciones Maroto el de la Moto. Y fíjate tú, que no ha sido así. La pobres, sin saberlo, acaban en plantilla en el Hoyo 19 o La Polvera. Y si no tienen las tetas donde les exige el protoculo como las Femen, se tienen que ir a robar carteras a la Plaza Mayor.

Madrid no es ciudad para bromas, por eso Pilar viene siempre tan seria. No se debe jugar sucio, aunque haya estado de porquería hasta el ático con la última huelga de limpieza.

Las Femen estas, que nos han venido del norte como el frío y el bonito, juntas tiene más peligro que Sánchez Gordillo en un súper. Aunque por muy peligosas que sean ya las querría para sí Berlusconi para examinarlas más de cerca o, llegado el caso, para que le alegren las mañanas talegueras corriendo en bolas delante de su Prision Break particular como la presentadora francesa esa del tiempo entre descosturas que se ha cruzado medio prado haciendo tolón tolón con las mameyas.

Y digo yo,¿ porqué no nos traemos a las Femen a Murcia? Pero que vengan sin gritar, que aqui en nuestra Región nos hablamos abonico y eso de las algarabías lo dejamos para otros. Podemos decirle a nuestro consejero Pedro Alberto que las contrate. ¿No contrató a uno con nombre raro, raro, raro? Aunque luego supiéramos que fue una fallida campaña de promoción para despilfarrar una buena parte del erario público. Estas son de carne y hueso. Más carne que hueso, y aquí hablaríamos de mejor erario, el púbico no el público. Es más, no valen para jugar al póker, esconden poco.

Aprovechemos que las Femen se han ido extendiendo internacionalmente como Artur Mas por sus protestas de pechos desnudos contra el turismo sexual o de instituciones religiosas para traérnolas al calor de nuestros pechos.

Les podemos decir para que vengan que aquí no hay turismo sexual, que nuestros hoteles disponen, bajo petición, de cinturones de castidad modelo Rouco Varela, que por ahí no pasa ni el aire. Que se respeta a los homosexuales tanto que la mayoría tienen un buen cargo político, en la cultura o en la Administración. Que todos son bienvenidos y los que tiene una oveja como pareja también. Que Murcia es el futuro, que aqui nos queremos todos, hombre.

Que vengan a enseñarnos lo que ellas quieran, pero sin gritos y sin encadenarse, que en Murcia se vive muy bien y no estamos para que nos atolondren. Que aquí La Cadena es un puerto y la teta es el Roldán, pero que si quieren alegrarnos la navidad aquí estamos. Que vengan, que vengan las Femes, que aquí somos todos unos despechados.

Via: laopiniondemurcia.es

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